Con la cabeza bien alta

Los celestes demuestran ante el líder que pueden plantar cara a cualquiera

FRANCISCO G. LUQUE | ACTUALIZADO 20.09.2016 - 05:02



El delantero ejidense Samu Corral presiona a un jugador del Marbella.



Con seis bajas, tres de ellas de jugadores que estaban teniendo protagonismo en los planes de Alberto González, se presentaba el CD El Ejido en casa de un líder Marbella ante el que perdió por 1-0. Derrota que duele, como todas, pero de la que los ejidenses salieron con la cabeza bien alta al demostrar que pueden competir ante cualquier rival a pesar de las adversidades que puedan surgirles, siendo en este caso la de la falta de efectivo su mayor handicap.



Los del Poniente almeriense sabían que no era un reto nada fácil el de salir airosos del feudo de un primer clasificado que ha ganado cinco de los cinco encuentros que ha disputado y que tiene una plantilla y un presupuesto destinado a luchar por el ascenso en la presente campaña. Pero aún así, los malagueños acabaron pidiendo la hora. Se toparon con un equipo ejidense que no dio por perdido el duelo hasta el pitido final de una contienda en la que rozó el empate en la recta final. Se lo hubiese merecido, pero como dice González, "el fútbol no entiende de justicia".



Al final, los almerienses se vinieron de vacío en lo que a puntos se refiere, pero con la sensación de haber hecho su trabajo, que no era otro que el de competir. Y vaya si lo hicieron, pero no pudieron perforar la meta de un rival al que los galones no le sirvieron para evitar sufrir ante los celestes, que se marcharon de tierras malagueñas sin un buen resultado pero cargados de moral y confianza pese al tropiezo. Entraba en sus planes no sacar fruto en Marbella, en unos planes en los que no estaba rendirse. Los ejidenses hicieron su trabajo a la perfección, pero les faltó suerte de cara al gol, aunque bien es cierto que no gozaron de las mismas ocasiones que la semana anterior ante otro gallito, el Cartagena, al que sí ganaron (1-0).







Adolfo, Dani Espinar y Pedro Mérida se cayeron de los planes del técnico celeste por lesión, por lo que González optó por sacar de inicio en banda derecha a Paquito, que está a un gran nivel y fue un incordio para la defensa marbellí, poner a Javilillo en el centro, y dar minutos al juvenil Kevin, que entró en sustitución de Samu Corral. Todos se adaptaron a las circunstancias y se dejaron la piel sobre un terreno de juego en el que el CD El Ejido volvía a demostrar que esta categoría no le queda para nada grande.



Con la cabeza bien alta